Natalia Ribas, directora de Admisiones de Juaneda Hospitales.
El grupo hospitalario privado activa este servicio, único y pionero en la sanidad privada balear, que lleva al paciente a despreocuparse de problemas administrativos que en otros hospitales tiene que resolver / El nuevo y revolucionario programa de gestión ALMA incluye esta posibilidad, previendo todas las trabas y errores
Hasta ahora, cuando a un paciente se le indicaba una cirugía o determinada prueba diagnóstica, tenía que acudir personalmente, por Internet o llamar a su compañía de seguros para pedir la autorización, una tramitación que podía ser compleja, máxima en una situación de estrés.
Juaneda Hospitales ha puesto en marcha el primer Departamento de Autorizaciones de la sanidad privada. El paciente ya no tiene que preocuparse de esos trámites. El Departamento se encarga de toda la tramitación y busca alternativas en caso de que el seguro tenga limitaciones.
La andadura de este Departamento comenzó en enero en Juaneda Hospitales. Es el primero y el único en la sanidad privada balear. Por ello la implantación se hizo de un modo progresivo, una especialidad diferente cada semana, para detectar problemas y solucionarlos.
Este nuevo servicio se procesa desde dos estructuras: una, las autorizaciones para intervenciones quirúrgicas y otra, para pruebas radiológicas, de laboratorio y en consultas externas que requieran autorización por parte de la compañía de seguros del paciente.
“Pruebas, como las ergometrías de cardiología, que se realizan en consulta han de ser autorizadas por algunas aseguradoras”, explica Natalia Ribas, directora de Admisiones. Todo se tramita a través del nuevo departamento, en el futuro, además, “sin papeles”.
El nuevo programa ALMA, que se está implementando en Juaneda Hospitales y que ha de suponer una revolución informática de la administración sanitaria, incluye una gestión completamente eficaz y virtual de toda la información que se procesa para la autorización.
Este servicio se ha ido pilotando hasta hace poco en varios de los centros de Juaneda Hospitales. En breve se iniciará la segunda fase que afectará a Hospital Juaneda Miramar y posteriormente al resto de hospitales del grupo (Muro y Menorca).
En Miramar se solicitaban, hasta ahora y en una primea fase, las autorizaciones de procesos ginecológicos. En Clínica Juaneda, también en una primera fase, las de las intervenciones de hemodinámica, especialmente complejas en su tramitación.
“En ausencia de esta ayuda –explica Ribas –para procesos dificultosos, el paciente tenía que acceder (o llamar) a su compañía, con unos talonarios y códigos complejos, y se corría el riesgo de que la aseguradora solicitara documentación añadida y hubiera que volver al hospital.”
“En muchas ocasiones –añade Natalia Ribas –es muy difícil para un paciente solicitar una autorización. Desconocen que tenemos médicos externos que les están atendiendo y piden la autorización a nombre del hospital, pero no para ese facultativo específico, por ejemplo.”
Tener un Departamento de Autorizaciones “es un éxito para solventar todas esas dificultades”, es para el paciente “muy cómodo saber que, en ese sentido, no se tiene que preocupar de nada. Nosotros vemos cuándo un seguro no autoriza un servicio y activamos otras opciones”.
Una de estas opciones es poner el caso en manos de Juaneda Accesible, un servicio que busca las soluciones más efectivas para cada caso, facilitando el acceso de los pacientes a las pruebas y procedimientos que le han sido indicados, si hubiera para ello algún problema.
Natalia Ribas recuerda con esta mención otra de las grandes innovaciones de Juaneda Hospitales para sus pacientes. Juaneda Accesible facilita a los usuarios sin seguro o con seguros limitados el acceso más fácil y económico a los servicios médicos privados del grupo.
Ribas ha diseñado un protocolo para la gestión de autorizaciones, que pueden ir desde el ingreso hospitalario, una prueba diagnóstica, una intervención quirúrgica, etcétera. Este protocolo detalla todos los procedimientos y requerimientos de todas las aseguradoras.
“Algunos elementos de la autorización son muy importantes y muy difíciles de gestionar por el paciente”, explica Ribas: “Es el caso de la autorización del material quirúrgico, una prótesis de cadera o de rodilla, o en el caso de que se precise una tecnología quirúrgica determinada.”
“Por ejemplo –explica –en neurocirugía puede ser necesario un neurolink, una tecnología muy cara, que si el seguro no cubre puede suponer un sobrecoste para el paciente. Igual, con la cifoplastia, una operación de espalda con materiales que alguna compañía no cubre.”
Hasta ahora, cuando un médico indicaba una intervención, entregaba al paciente un talón y un informe para la aseguradora y el paciente debía tramitarlo, sin que el hospital conociera las carencias de su seguro, “y podía darse el caso de que el paciente no volviera en meses”.
“Ahora, el Departamento de Autorizaciones detecta las carencias, exclusiones o límites de las coberturas”. El Departamento de Autorizaciones funciona de lunes a viernes, de 08:00 a 20:00 para ofrecer un horario amplio y dar continuidad a los tratamientos sin interrupciones.