El proyecto de ley de presupuestos autonómicos de 2016, que se encuentra en periodo de tramitación parlamentaria, recoge este montante económico, que servirá para llevar a cabo una de las actuaciones emblemáticas de esta nueva legislatura, destinada a plantar batalla al aumento de las listas de espera registrado en estos últimos años.
Los datos presentados por el máximo responsable del Ib Salut marcan que la lista de espera quirúrgica de los hospitales públicos de Baleares se ha reducido en un 1,04% en un año, de septiembre de 2015 al mismo mes del año anterior, mientras que la lista de espera de consultas se ha incrementado en un 7,4%.
Ahora bien, las cifras, pese a la mejora auspiciada en el caso de la cirugía, siguen sin ser positivas. Todavía hay demasiados pacientes que esperan infructuosamente a que les llamen para acceder a la consulta de medicina especializada que han solicitado, o para someterse a una determinada intervención quirúrgica. En términos de salud poblacional, esta situación de demora es insostenible y absolutamente inaceptable.
Ese es el sentido del plan de reducción de las listas de espera que el Govern planea llevar a cabo. El programa está diseñado para corregir la tendencia al alza de las listas de espera y reducir los tiempos de demora, y se fundamenta en cinco ejes.
Entre estos pilares neurálgicos de la actuación hay que destacar el de la autoconcertación, que permitirá a los propios profesionales practicar las intervenciones quirúrgicas o atender las consultas de medicina especializada en jornada extraordinaria.
Al mismo tiempo, el plan prevé el impulso decidido a la atención a los pacientes crónicos y el aprovechamiento de las instalaciones, recursos y equipamientos que están en condiciones de aportar los hospitales sin ánimo de lucro que forman parte, igualmente, de la red asistencial pública.
¿Cuáles son las estimaciones? Juli Fuster las subrayó en rojo durante la presentación del plan de contención de las listas de espera. La idea es que, a medio y largo plazo, se haya podido reducir a cero el número de personas que esperan más de 180 días para una intervención quirúrgica. Actualmente, este colectivo está integrado por nada menos que 2.847 usuarios, una cifra que nada tiene que ver con la sanidad de excelencia que se pretende impulsar y consolidar en Baleares.
Además, cuando el plan se sitúe en su punto más álgido de ejecución, el Ib Salut confía en que ningún paciente deberá esperar más de 120 días para ser atendido en una consulta.