Una treintena de expertos nacionales e internacionales en psiquiatría y psicología, de organizaciones colegiales y políticas sanitarias se darán cita en Cádiz los días 4 y 5 de noviembre, para abordar los principales retos en salud mental de los médicos.
Será en el marco del IX Congreso Nacional del Programa de Atención Integral al Médico Enfermo (PAIME) y del III Encuentro Latinoamericano del PAIME, que ya en varias ocasiones se han celebrado forma simultánea para compartir experiencias.
Este encuentro, organizado por la Fundación para la Protección Social de la Organización Médica Colegial (FPSOMC) bajo el lema “Cuidando de ti, cuidando de todos”, analizará el impacto del COVID19 sobre la salud mental y hábitos de los médicos.
Con el objetivo de facilitar la accesibilidad al programa, ponentes y noticias del Congreso se ha habilitado un espacio web (https://www.ixcongresopaime.com/) en el que además todos lo que deseen pueden realizar la inscripción para acudir a este encuentro científico.
La actividad programada por el Comité Científico del Congreso a lo largo de las dos jornadas tendrá un formato de conferencias, mesas redondas o foros de discusión, y se focalizará principalmente en la cartera de servicios del PAIME.
También, en la capacidad de respuesta ante las nuevas necesidades; la salud mental de los médicos en formación ante el COVID19; la respuesta institucional ante las actuales necesidades de atención y apoyo a la salud de los médicos.
Se tratarán también los retos actuales de la financiación del PAIME, así como las estrategias para comunicar el programa. El día 3 de noviembre, previo a la celebración del Congreso, tendrá lugar el III Encuentro Latinoamericano del PAIME.
Este encuentro contará con la participación y experiencias de representantes de organizaciones médicas latinoamericanas. El objetivo es compartir conocimientos, experiencias y estrategias sobre el PAIME en sus respectivos ámbitos colegiales.
Durante el encuentro tendrá lugar la entrega de los Premios PAIME, reconocimiento público a la trayectoria, el compromiso y la labor de profesionales, organizaciones médicas, administraciones y otras entidades que velan por la salud de los médicos en España.
Como en años anteriores, se presentará el Informe de Datos PAIME, con datos de 2019 y 2020 aportados por los responsables colegiales y clínicos del Programa y es una herramienta importante para conocer la realidad del PAIME y a dónde apunta su evolución.
El fin último del Congreso es congregar a las juntas directivas de los colegios oficiales de médicos, responsables colegiales del PAIME, coordinadores de la Red PAIME y demás interesados, para reflexionar sobre el Programa Científico.
Con ello se pretende consensuar respuestas colegiales ante el reto de la pandemia de COVID19 y la responsabilidad común de proporcionar una atención integral al médico enfermo, pero también promover acciones de prevención y promoción de la salud.
“La celebración de estos encuentros tienen más sentido este año que nunca. Cuidar de los que cuidan de los profesionales que han estado en primera línea en esta pandemia sigue siendo prioritario para las organizaciones colegiales”, asegura el Dr. Tomás Cobo, presidente de la Fundación para la Protección Social de la OMC.
Por su parte, para el presidente del Colegio de Médicos de Cádiz, el Dr. Juan Antonio Repetto, “acoger y compartir la organización de esta edición del Congreso PAIME es un honor que asumimos con enorme ilusión y responsabilidad”.
El PAIME es un programa colegial único en España desde el ámbito profesional y referente internacional del que disponen los Colegios de Médicos bajo el paraguas de la FPSOMC, para atender a médicos que padecen trastornos mentales y/o conductas adictivas.
Su objetivo es rehabilitar a los profesionales enfermos en este ámbito de la salud mental, de un modo discreto que no menoscabe su crédito y garantizar con ello que tras su curación regrese a la práctica clínica en las mejores condiciones posibles.
Desde 1998 han sido atendidos 5.171 profesionales con una tasa de recuperación del 90%. Se trata de un instrumento de control de la buena praxis médica y de garantía para la población: “cuidar al médico enfermo supone defender la salud de los ciudadanos”.
