Parece, a falta del análisis riguroso que en breve darán a conocer los epidemiólogos del Servicio de Epidemiología de la Conselleria de Salut que la incidencia de la pandemia de COVID19 ha llegado a una situación que los expertos denominan «valle», es decir, que se mantiene a la baja.
En las últimas 24 horas se ha registrado un leve aumento de contagios, es cierto, pero es que los 40 nuevos casos conocidos son solo 7 más que la víspera, un crecimiento inusitadamente bajo en relación a hace pocas semanas, cuando aún cabalgábamos el «pico» de la curva.
Con todo y con las decepciones tras la primera y la segunda ola, los epidemiólogos dicen ahora que «doblegar la curva» no significa vencerla para siempre (como se dijo tras el primer confinamiento) y que tras un «valle» pueden llegar más «picos» y más muertos.
Con los nuevos contagios, el número total de personas infectadas conocidas en las Islas se sitúa ya en 56.245, de las cuales 729 han muerto (dos más que hace 24 horas) y de las que en estos momentos están con el contagio activo 1.544 (cada vez menos, es cierto).
Lo cierto es que las UCIs de Baleares registran en estos momentos los niveles de ocupación más bajos desde octubre: de los 142 pacientes de COVID19 que precisan atención hospitalaria, 41 están en UCI (8 menos que la víspera) y 101 en planta (dos menos).
La tasa de positividad se sitúa en el 1,46% de las 2.739 pruebas diagnósticas realizadas en las últimas 24 horas. La OMS señala que no se ha de superar el 3% de esa tasa para que la situación epidemiológica esté controlada, marcando una tendencia en ese sentido.
Indicadores epidemiológicos del COVID19 en Baleares (3/III/212)
